Mientras buscaban al soldado
Wilder Carcausto, desaparecido, en Tacna en la Calle Francisco Cornejo, Cuadra
9, miembros del Ejército Peruano, bailaban, tomaban y tenían sexo con mujeres.
Esta denuncia la hicieron
los vecinos de la zona que grabaron en video las fiestas, los escándalos que protagonizaban
los miembros del ejército.
Según denuncian los vecinos
era una especie de burdel privado del ejército.
Llegaban militares en autos,
motos, para divertirse a lo grande y en
horas de la madrugada.
La población está encerrada,
enjaulada, prohibida de bailar, tomar cerveza, los interviene si hacen eso, los
llevan a la comisaria.
Pero cuando se trata de
militares, las normas de confinamiento, de Cuarentena en Coronavirus, no
aplican.
Los militares tienen el
encargo, de hacer cumplir las normas sanitarias que por el Coronavirus, han dado las autoridades.
El contagio de coronavirus
es fácil, mediante la ingesta de cerveza, porque se bebe de un mismo vaso.
Y de otra parte se supone,
que son las autoridades quienes deben de
dar ejemplo, a la población civil.
Estos diez militares que tenían
su burdel en la Calle Francisco Cornejo Cdra.
9, de la ciudad de Tacna, deberían ser sancionados.
Pero al parecer, están siendo
solapados por su comando, quien saco un comunicado señalando, que el Ejército
Peruano, no ha alquilado dicho inmueble, y que lo habrían hecho, miembros de su
institución, pero de manera personal.
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