Es curioso ver cómo evoluciona el mundo de las motocicletas. Desde principios del siglo XXI nos enzarzamos en una vorágine de renovaciones con modelos cada vez más potentes, luchando por ofrecer la cifra de potencia más loca. En torno al año 2000 alucinábamos con potencias en torno a los 150 caballos declarados, hasta que en 2001 apareció la Suzuki GSX-R1000 para romper la baraja con sus 160 cv y una estética rompedora.
El siguiente salto llegó con la Kawasaki ZX-10R de 2003 con 175 cv y aspecto MotoGP de la época, luego se nos saltaron los empastes con motos que rompían la barrera de los 180 cv (sobre el papel). Todo aquello quedó muy lejos en el tiempo, hemos pasado una crisis y las deportivas se han radicalizado aún más pensando en los circuitos, y el resultado es que hemos visto caer la cifra de los 200 cv como algo habitual, ¡para una moto de calle!.
Kawasaki ZX-10RR Ninja
Para esta temporada, Kawasaki se ha apuntado al carro de ofrecer una serie de motos aún más especializadas que las Superbike de calle. La Kawasaki ZX-10RR va un paso más allá de la ZX-10R que ya ofrece 200 cv y añade a su oferta una culata con levas de carreras, empujadores con tratamiento anti-fricción, cárteres reforzados... Vamos, un pepinaco.
No han declarado oficialmente la cifra de potencia, pero irá más allá de los 200 cvdel modelo básico, y ya de paso incluye además llantas Marchesini más ligeras, pinzas Brembo M50, plataforma de medición inercial de seis ejes, cambio rápido up&down y geometrías variables.
Sólo se fabricará una corta tirada de 500 unidades para todo el mundo así que será complicado que veas uno de estos misiles japoneses por la carretera.
Ducati 1299 Superleggera y 1299 Panigale Final Edition
Como bien sabrás a estas alturas, en Borgo Panigale están despidiendo a sus queridas Panigale. El ciclo de vida de la deportiva de más de un litro de cilindrada caducará en breve con la llegada de un nuevo modelo equipado con el motor de cuatro cilindros en uve herencia de MotoGP, así que no hay mejor despedida para las Superbike bicilíndricas por excelencia que uno modelos a cada cual más exclusivos.
Por un lado, la ultra-exótica Ducati 1299 Superleggera de casi 100.000 euros, con chasis, llantas, basculante y carrocería de fibra de carbono. Por el otro la mucho más asequible Ducati 1299 Panigale R Final Edition repleta de detalles y un precio de sólo 45.000 euros.
Ambas comparten buena parte de su motor con influencias del WorldSBK y son capaces de ofrecer unas cifras descomunales de potencia: 209 cv para la 1299 Panigale R Final Edition de 168 kg y 215 cv para la Superleggera de 150 kg en seco. La receta ha sido utilizar elementos de carreras para una moto de serie como cigüeñal aligerado con elementos de tungsteno, bielas de titanino, pistones mecanizados con camisas de aluminio, válvulas de titanio y escape Akrapovic sí, también de titanio.
Yamaha YZF-R1
Parece que ha pasado un mileno, pero en 2015 apareció la última generación de la Yamaha YZF-R1, una moto nacida con genes de MotoGP y la colaboración de Valentino Rossi en su desarrollo para conseguir una deportiva pura sangre, muy compacta y con 200 cv para 199 kg de peso.
Cigüeñal Crossplane, bielas de titanio, pistones de aluminio, escape 4-2-1 también de titanio, compresión 13:1, un cerebro IMU de los mejores de la categoría, un sonido que enamora y una curva de potencia realmente aprovechable hacen de la Superbike de Iwata un caramelito con dos ruedas realmente apetecible tanto para los más quemados.
Aprilia RSV4 RF
Con un motor de cuatro cilindos en uve, 201 caballos de potencia de serie y un precio confirmado de 24.359 euros, la Aprilia RSV4 RF es lo más parecido a una moto de carreras que un usuario normal puede llevar por la calle. Ahora Aprilia ofrece incluso la opción de apretarle las tuercas al tetra hasta superar los 230 caballos, aunque en teoría sólo para circuito.
La actual Superbike de Noale es la heredera directa de la moto con la que la fábrica italiana ganó el Campeonato del Mundo de Superbikes en 2010 y 2012 con Max Biaggi y una vez más en 2014 con Sylvain Guintoli. Radical como pocas y con un pedigree envidiable, las RSV4 se postulan como una de las motos más excitantes del mercado actual.
BMW S 1000 RR
Por méritos propios, la BMW S 1000 RR se merece un puesto de honor en este listado pese a no romper la barrera de los 200 cv. Con un motor de cuatro cilindros en línea, 999 cc y 199 cv se queda a un suspiro de la cifra mágica, pero cuando apareció en 2009 fue la primera en golpear con dureza la batalla por la potencia máxima.
La primera versión llegó hace casi 10 años al Salón de Munich de 2008 con unos estremecedores 193 cv a 13.000 rpm y una filosofía que nadaba contracorriente. BMW abandonó su filosofía tradicional para luchar de tú a tú contra las grandes fábricas japonesas y creó una base que aún hoy sigue dando guerra en el Campeonato del Mundo de Superbikes.
Ahora bien, si esta bávara no debería figurar en este listado no deberemos esperar demasiado para conocer su renovación. Una nueva generación que dejará atrás las actualizaciones para ser un modelo totalmente remozado y que superará previsiblemente con creces los 200 cv.
Y bueno, si aun así necesitas algo más, también puedes optar por la brutal BMW HP4 RACE con chasis de fibra de carbono y un motor de SBK que da 215 cv para 171 kg. ¿Lo malo? Que sólo es para circuito, que cuesta 80.000 euros y que cada 5.000 km hay que poner un motor nuevo.
Suzuki GSX-R1000
La esperadísima renovación de la Gixxer no ha defraudado a los amantes de la franquicia más popular entre las Superbike. Haciendo gala de toda la experiencia acumulada en MotoGP los de Hamamatsu han parido la Suzuki GSX-R1000 más radical de la historia dispuesta a plantar cara a las mejores de la categoría con virguerías tales como distribución variable, árboles de levas huecos y empujadores como los de la GSX-RR que permiten al cuatro cilindros de 998 cc subir hasta unas loquísimas 14.500 vueltas.
Lo mejor, tal y como pudimos comprobar a sus mandos en el Circuito de Almeríaes que esa estirada que en muchos casos se encuentra vacía, en el novedoso motor japonés se llena con unos impresionantes 202 caballos que parecen no tener final.
MV Agusta F4 1000 RC
Volvemos a Italia para encontrarnos otra belleza exótica y muy apetecible. Las siempre bellísimas motos de Varese también se han convertido en algunas de las más potentes del mundo tal y como salen de su embalaje, y el mejor ejemplo es la MV Agusta F4 1000 RC.
El motor de las 250 únicas unidades producidas es un propulsor Corsa Corta de cuatro cilindros en línea de los pocos que mantienen su configuración tradicional tetra que se erige hasta los 205 caballos en su versión de calle y los 212 cv para la equipada con el kit de circuito y que incluye un precioso escape de titanio SC Project. Por cierto, su peso es de sólo 175 kg sobre la báscula.
Con un precio de 40.090 euros y una decoración fiel a la utilizada por la marca en el WSBK con Leon Camier a los mandos, además de una estética siempre impactante y su basculante monobrazo es seguramente una de las motos más bellas que podrías comprar, si tuvieras la cartera suficientemente llena.
Kawasaki H2
Envuelta en un halo de misticismo sumamente exótico, la Kawasaki H2 se ha convertido en un icono de fanáticos y coleccionistas por ser la primera moto sobrealimentada de la era moderna. Su estética radical esconde un motor de cuatro cilindros en línea y 998 centímetros cúbicos forzados mediante compresor que con la ayuda del ram air elevan la potencia hasta los 210 cv.
Electrónica de última generación, suspensiones KYB crema, basculante monobrazo adosado a un chasis tubular de acero tipo Trellis y una aerodinámica estudiada a conciencia dan como resultado una de las motos menos discretas pero más codiciadas de la actualidad. Incluso las 120 unidades de la H2 Carbonfueron vendidas inmediatamente tras su presentación en el EICMA 2016.
Y sí, su prima cercana la H2R sería la reina de este listado con sus abrumadores 310 caballos (326 con ram air), pero estamos hablando de motos homologadas para circular por la calle.
No hay comentarios:
Publicar un comentario