Este sábado 11 de octubre, se cumple un año de la designación de Lima como ciudad organizadora de los Juegos Panamericanos 2019, el evento deportivo más importante de nuestro continente.
Pasado este tiempo, el Comité Organizador de los Juegos Panamericanos 2019 (Lima 2019) anuncia que ya está a punto de concluir uno de los escenarios de esta importante cita deportiva. Además, está a la espera de una respuesta del Ejecutivo para seguir construyendo más infraestructura.
“En este primer año, hemos avanzado bastante en la organización y estamos comenzando a capacitar a las cabezas directivas de los juegos”, indicó a Publimetro Patrick Espejo, director ejecutivo de Lima 2019.
Señala que a fin de mes se terminará de construir el primero de los 5 escenarios que ellos han propuesto para esta 18ª edición de los Juegos, que se realizarán del 26 de julio al 11 de agosto del 2019.
Se trata de una sede donde habrá un velódromo, dos coliseos polideportivos y una residencia de 230 habitaciones para deportistas de alto nivel. Está ubicado en la actual Villa Deportiva Nacional (Videna), en San Luis. “En enero del 2015 se estará inaugurando este espacio”.
Si bien este es por ahora el aspecto tangible de este primer año de trabajo, el Comité Organizador está ahora a la espera de que el Gobierno se pronuncie sobre un plan maestro que le remitieron en julio pasado.
En esa propuesta, de 790 páginas, el comité propone, además de lo hecho en La Videna, otras cuatro grandes sedes en la Universidad San Marcos, el Rímac, La Punta y el Campo de Marte.
En el caso de la Universidad San Marcos, sugieren reacondicionar su estadio de fútbol para que también pueda albergar una gran pista de atletismo y un coliseo multiusos.
También proponen construir un Gran Coliseo de Lima en la zona de Cantagallo, en el Rímac, donde podrían desarrollarse competencias de vóley y las finales de básquet. “Esta construcción tendría un impacto espectacular en la zona y permitiría mejorar los accesos a esta parte de la ciudad porque planearíamos construir dos puentes ahí”.
En La Punta se construiría el Parque Acuático para los deportes de remo, canotaje, esquí acuáticos, natación en aguas abiertas y triatlón.
Por último, el actual Campo de Marte, en Jesús María, se transformaría en un gran espacio con cinco piscinas.
El plan maestro propone además remodelar con obras de mucha menor envergadura otros espacios como el Coliseo Dibós (San Borja) y la Base Aérea de las Palmas (Surco). “Serían reparaciones menores”.
Espejo explica que esta propuesta ambiciosa fue desarrollada por la empresa española Ayesa, quien mapeó la ciudad para determinar los mejores espacios para albergar los juegos.
Considera que esta propuesta busca dejarle a Lima un gran “legado” para que sea reaprovechado “al día siguiente de la clausura de los Juegos Panamericanos”, sin desperdiciar el desembolso económico que se necesitará. “Este evento deportivo es una excelente oportunidad para reinventar Lima”.
En tal sentido, detalla que los espacios tendrían gradas móviles que se retirarían luego de los Panamericanos para reducir los costos de mantenimiento a futuro.
Por ahora, el gobierno deberá decidir si aprueba la propuesta, la modifica u opta por otro modelo. De aprobarse el plan, el Comité proyecta que las infraestructuras estén listas para ser ‘probadas’ en el primer semestre del 2018. De esta forma, todo quedaría listo para recibir a este importante evento deportivo.
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